Los proveedores de la Plataforma como servicio (PaaS) ofrecen una plataforma basada en la nube para crear y ejecutar aplicaciones.
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En el modelo de Plataforma como servicio (PaaS), los desarrolladores básicamente alquilan todo lo que necesitan para crear una aplicación, contando con un proveedor de la nube para las herramientas de desarrollo, la infraestructura y los sistemas operativos. Este es uno de los tres modelos de servicio de informática en la nube. PaaS simplifica mucho el desarrollo de aplicaciones web; desde la perspectiva del desarrollador, toda la gestión del backend tiene lugar en segundo plano. Aunque PaaS tiene algunas similitudes con la informática sin servidor, hay muchas diferencias fundamentales entre ellos.
Los tres modelos de informática en la nube son PaaS, SaaS (Software como servicio) e IaaS (Infraestructura como servicio). IaaS hace referencia a la infraestructura de informática en la nube (servidores, almacenamiento, etc.) gestionada por un proveedor de la nube, mientras que SaaS hace referencia a las aplicaciones completas que se alojan en la nube y que las mantiene el proveedor de SaaS. Si un cliente de SaaS es como alguien que se alquila una casa, entonces un cliente de PaaS es como alguien que alquila todo el equipo pesado y las herramientas eléctricas necesarias para construir una casa rápidamente, si las herramientas y el equipo las tuviera que mantener el propietario de forma continua.
Se puede acceder a PaaS con cualquier conexión a Internet, lo cual permite que se pueda desarrollar una aplicación completa en un navegador web. Ya que el entorno de desarrollo no está alojado localmente, los desarrolladores pueden trabajar en la aplicación desde cualquier parte del mundo. Esto permite la colaboración de equipos que están repartidos en distintas ubicaciones. También implica que los desarrolladores tienen menos control sobre el entorno de desarrollo, aunque esto conlleve muchos menos gastos generales.
Las principales ofertas incluidas por los proveedores de PaaS son:
Otros proveedores también pueden incluir otros servicios, pero estos son los servicios básicos de PaaS.
Los proveedores de PaaS ofrecen una serie de herramientas necesarias para el desarrollo de software, como un editor de código fuente, un depurador, un compilador y otras herramientas fundamentales. Estas herramientas pueden ofrecerse juntas como una estructura. Las herramientas específicas ofrecidas dependerán del proveedor, pero las ofertas de PaaS deberían incluir todo lo que un desarrollador necesita para crear su aplicación.
Las plataformas que se ofrecen como servicio suelen incluir middleware, para que los desarrolladores no tengan que crearlo ellos mismos. El middleware es el software situado entre las aplicaciones dirigidas al usuario y el sistema operativo de la máquina; por ejemplo, el middleware es lo que permite que el software acceda a la entrada del teclado y el ratón. El middleware es necesario para ejecutar una aplicación, pero los usuarios finales no tienen que interactuar con el mismo.
Un proveedor de PaaS proporcionará y mantendrá el sistema operativo en el que trabajan los desarrolladores y se ejecuta la aplicación.
Los proveedores de PaaS administran y mantienen las bases de datos. Lo normal es que también proporcionen a los desarrolladores un sistema de gestión de bases de datos.
PaaS es el siguiente nivel de IaaS en el modelo de servicio de informática en la nube, y todo lo que se incluye en IaaS también se incluye en PaaS. Un proveedor de PaaS gestiona los servidores, el almacenamiento y los centros de datos físicos, o los compra de un proveedor de IaaS.
El PaaS se utiliza para crear aplicaciones más rápido de lo que sería posible si los desarrolladores tuvieran que preocuparse de crear, configurar y aprovisionar sus propias plataformas e infraestructura de backend. Con PaaS, solo tienen que escribir el código y probar la aplicación, y el proveedor se encarga del resto.
PaaS permite a los desarrolladores crear, probar, depurar, implementar, alojar y actualizar sus aplicaciones, y todo en el mismo entorno. Esto permite que los desarrolladores puedan asegurarse de que una aplicación web funcionará correctamente tal y como está alojada antes del lanzamiento, y simplifica el ciclo de vida del desarrollo de aplicaciones.
En muchos casos, el PaaS es más rentable que el IaaS. Los gastos generales se reducen porque los clientes de PaaS no tienen que gestionar y aprovisionar máquinas virtuales. Además, algunos proveedores tienen una estructura de precios de pago por uso, en la que el proveedor solo cobra por los recursos informáticos que ha utilizado la aplicación, lo que suele suponer un ahorro para los clientes. Sin embargo, cada proveedor tiene una estructura de precios ligeramente diferente, y algunos proveedores de plataformas cobran una tarifa plana al mes.
Los proveedores de PaaS gestionan todas las licencias de los sistemas operativos, las herramientas de desarrollo y todo lo que se incluya en su plataforma.
Es posible que sea difícil cambiar a proveedores PaaS, puesto que la aplicación está hecha usando las herramientas del proveedor, y de forma específica para su plataforma. Cada proveedor puede tener distintos requisitos arquitectónicos. No todos los proveedores dan soporte a los mismos idiomas, bibliotecas, API, arquitectura o sistema operativo usado para construir y ejecutar la aplicación. Para cambiar entre proveedores, es posible que los desarrolladores necesiten reconstruir o alterar en gran parte su aplicación.
Cambiar de proveedor de PaaS supone una importante inversión de esfuerzo y recursos, lo cual puede hacer que las empresas sean más dependientes de su proveedor actual. Un pequeño cambio en los procesos internos o en la infraestructura del proveedor podría tener un gran impacto en el rendimiento de una aplicación que está diseñada para funcionar de forma eficaz en la configuración anterior. Además, si el proveedor de repente cambia su modelo de precios, aumenta el coste de la aplicación.
En una arquitectura PaaS, el proveedor externo almacenará la mayor parte o la totalidad de los datos de una aplicación, además de alojar su código. En algunos casos, el proveedor puede almacenar las bases de datos a través de un tercero, un proveedor de IaaS. Aunque la mayoría de los proveedores de PaaS son grandes empresas que cuentan con fuertes sistemas de seguridad, esto hace que sea difícil evaluar y probar completamente las medidas de seguridad que protegen la aplicación y sus datos. Además, para las empresas que tienen que cumplir con estrictas normas de seguridad de datos, el tener que verificar el cumplimiento de los proveedores externos adicionales añadirá todavía más obstáculos a su salida al mercado.
El PaaS y la computación sin servidores son similares porque en ambos casos todo lo que un desarrollador tiene que preocuparse por hacer es escribir y actualizar un código, y el proveedor entrega todos los procesos de backend. Sin embargo, el escalado es bastante diferente al usar los dos modelos. Las aplicaciones construidas usando la computación sin servidores, o FaaS, se escalan automáticamente, mientras que las aplicaciones PaaS no se escalarán si no se programan de tal forma. Los tiempos de inicio también pueden variar enormemente; las aplicaciones sin servidor pueden activarse y ejecutarse casi al instante, pero las aplicaciones PaaS se parecen a las aplicaciones tradicionales y tienen que estar ejecutándose la mayoría del tiempo o todo el tiempo para estar disponibles inmediatamente para los usuarios.
Otra diferencia es que los proveedores sin servidor no proporcionan estructuras o herramientas de desarrollo, como hacen los proveedores de PaaS. Y, por último, el precio diferencia a los dos modelos. La facturación de PaaS no es tan precisa como la de la informática sin servidor, en la que los cargos se desglosan en función del número de segundos o fracciones de segundo que se ejecuta cada instancia de una función.
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